________________________________________________________________________
PUNTOS CLAVE
________________________________________________________________________
La incontinencia de esfuerzo es la fuga de orina durante actividades físicas. Por ejemplo, es posible que pierda orina cuando haga ejercicios, tosa, estornude, se ría, levante objetos o tenga relaciones sexuales. Es un problema frecuente en las mujeres.
Los músculos del piso pélvico generalmente encajan cómodamente alrededor del cuello de la vejiga. Pueden formar un anillo de músculos que evita que la orina se escape a través de la uretra. La uretra es el tubo que lleva la orina fuera de la vejiga. Los músculos del piso pélvico pueden estirarse o torcerse durante la maternidad. Además, después de la menopausia la falta de estrógeno causa un adelgazamiento de los tejidos. Esto puede provocar pérdida del tono muscular. Una presión repentina de la vejiga (por ejemplo, debido la tos o el estornudo) puede vencer los músculos debilitados y provocar fugas de la orina.
Una causa menos frecuente es la cirugía pélvica, que puede debilitar los músculos de la pelvis o dañar los nervios de la pelvis.
Los síntomas pueden incluir la fuga de orina cuando levanta objetos u otra actividad física, cuando se ríe, tose o estornuda.
Su profesional médico le preguntará sobre sus síntomas y su historia clínica y la examinará. Se analizarán muestras de sangre y orina. Es posible que se la derive a un especialista, como un urólogo o ginecólogo, para profundizar la investigación y el tratamiento. (Un urólogo es un profesional médico que se especializa en los trastornos de las vías urinarias de los hombres y las mujeres, y del aparato reproductivo masculino. Un ginecólogo se especializa en el cuidado de la salud de las mujeres y especialmente en los trastornos del aparato reproductivo femenino).
Los músculos del piso pélvico con frecuencia se pueden fortificar mediante ejercicios de Kegel. Puede sentir los músculos que necesitan ejercitarse apretando los músculos en el área genital. Puede ser útil simular que está contrayendo los músculos de la pelvis para detener el flujo de orina o el paso de gases. Para hacer estos ejercicios:
Puede hacer los ejercicios de Kegel en cualquier lugar: Mientras está sentada en su escritorio, esperando un autobús, lavando la vajilla, conduciendo un automóvil, haciendo cola o mirando televisión. Nadie sabrá que los está haciendo.
Es posible que observe una mejora después de hacer los ejercicios de Kegel durante unas semanas. Sin embargo, es posible que no note mucha mejor después de 3 a 6 meses de ejercicios diarios. Debe seguir haciendo los ejercicios de Kegel todos los días para mantener fuertes los músculos pélvicos.
Puede preguntarle a su profesional médico acerca de unos conos que pueden usarse para ayudarlo a fortalecer los músculos del piso pélvico. Los conos vienen en tamaños diferentes. Puede empezar con un cono grande. Lo coloca en la vagina y trata de sostenerlo en el lugar durante 15 minutos un par de veces por día contrayendo los músculos de la pelvis y la vagina. Cuando lo haga con facilidad, puede intentar sostener en el lugar un cono más pequeño. Su profesional médico puede pedir los conos a una empresa de material quirúrgico.
Es posible que le sea difícil encontrar los músculos correctos que debe apretar durante los ejercicios de Kegel. Si está teniendo problemas al hacer los ejercicios de Kegel, puede conseguir ayuda a través de la biorretroalimentación o de un fisioterapeuta con experiencia en ejercicios del piso pélvico.
Algunos medicamentos pueden ayudarla a ajustar el anillo de músculos que controlan la liberación de orina.
Cuando los síntomas son severos y no tiene éxito cuando intenta fortalecer los tejidos con ejercicio u otros tratamientos médicos, es posible que le realicen cirugía para brindarle apoyo a la vejiga y los músculos pélvicos.