La necesidad de comer entre horas depende del control de los niveles de azúcar en la sangre y el número de calorías diarias que necesite su hijo. Los niños y adolescentes activos con mucha energía en general necesitan agregar refrigerios a su dieta.
Los refrigerios pueden ayudar a evitar el nivel bajo de azúcar en la sangre. Puede que quiera incluir aperitivos en la dieta de su hijo porque:
Los distintos tipos de refrigerios tienen distintos efectos. Las mejores opciones para refrigerios son alimentos:
Puede ser que los refrigerios con alto contenido de proteínas y fibra hagan satisfacer la sensación de hambre durante más tiempo. El azúcar de la fruta durará 1 o 2 horas, así que la fruta es un buen refrigerio para la mañana o la tarde. Los carbohidratos que se comen junto con proteínas, como el queso bajo en grasa o la carne magra, se convierten en azúcar más lentamente.
Los refrigerios ligeros antes de acostarse son importantes para los niños con diabetes que usan insulina a fin de controlar el nivel de azúcar en la sangre. Un refrigerio de carbohidrato y proteína ayuda a controlar el nivel de azúcar en sangre de su hijo durante la noche. Una comida ligera antes de acostarse suele incluir 15 gramos de carbohidrato y 7 u 8 gramos de proteína. Esta cantidad depende de la edad de su hijo, los niveles de azúcar y su actividad durante el día.
La leche y el yogur son una mezcla natural de carbohidratos y proteínas, y por lo tanto son buenos refrigerios para la hora de acostarse.
Si su hijo sigue con hambre tras el refrigerio, pruebe con paletas heladas o gelatina sin azúcar. O prepare un plato de verduras con verduras frías crujientes y una salsa sin grasas.
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