Fractura de rodilla

¿Qué es una fractura de rodilla?

Una fractura de rodilla (quebradura de rodilla) ocurre cuando se fractura 1 o más de los huesos que componen articulación de la rodilla. Puede ser sólo una torcedura o una pequeña fisura en el hueso o el hueso puede haberse quebrado en varias partes o haberse astillado. Algunas fracturas pueden estar expuestas.

Los huesos de la rodilla incluyen el hueso del muslo (conocido como el fémur), los dos huesos de la pantorrilla (la tibia y el peroné) y la rótula.

¿Cuál es la causa?

Las fracturas de rodilla pueden ocurrir de muchas formas: caídas, accidentes automovilísticos, actividades deportivas o golpes directos en la rodilla.

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas pueden ser los siguientes:

• Dolor, hinchazón, hematoma o sensibilidad que se presenta inmediatamente después de la lesión
• Dolor cuando se toca el área lesionada o que le impide poner peso en la pierna
• Problemas para doblar la rodilla
• Dolor que empeora con el movimiento
• Chirrido cuando la pierna lesionada se mueve y los huesos rotos rozan entre sí
• Espasmos musculares
• Cambio en la forma de la pierna

¿Cómo se diagnostica?

Su profesional médico le preguntará sobre los síntomas de su hijo y cómo se produjo la lesión. Su profesional médico examinará a su hijo. Las pruebas pueden incluir radiografías y otros análisis.

¿Cómo se trata?

El tratamiento depende del hueso fracturado y del tipo de fractura.

• Si su hijo tiene una herida abierta con la fractura, es posible que necesite tratamiento para controlar el sangrado o prevenir una infección.
• El profesional médico de su hijo colocará las piezas de hueso roto en su lugar. Darán medicamentos a su hijo primero para que el procedimiento sea menos doloroso.
• Podría necesitarse cirugía para arreglar el hueso fracturado de la pierna. Es posible que se usen clavos de metal, tornillos o placas para mantener unidas las partes del hueso.
• Puede que el profesional médico de su hijo coloque una abrazadera, una férula, un inmovilizador de rodilla o un yeso en la pierna para evitar que la rodilla se mueva mientras se cura.
  • Si su hijo tiene un yeso, asegúrese de que éste no se moje. Cubra el yeso con plástico cuando su hijo se bañe. Indique a su hijo que no debe rascarse la piel alrededor del yeso ni introducir cosas entre el yeso y la piel. Esto podría causar una infección.
  • Su profesional médico le indicará cuánto peso puede soportar la pierna de su hijo, en el caso de que pueda. Puede que su hijo necesite usar muletas o un bastón según lo indicado por su profesional médico.

Con tratamiento, la fractura puede tardar de 4 a 6 semanas en curarse. Es posible que su hijo necesite realizar ejercicios especiales para fortalecer y flexibilizar más la pierna. Consulte con el profesional médico de su hijo al respecto.

¿Cómo puedo cuidar a mi hijo?

Cumpla con todo el tratamiento que el profesional médico de su hijo le indique.

Para evitar que se hinche demasiado y ayudar a calmar el dolor, el profesional médico de su hijo le puede indicar que:

• Coloque una bolsa de hielo, una bolsa de gel o una bolsa de verduras congeladas envuelta en un paño sobre el área lesionada cada 3 o 4 horas durante un máximo de 20 minutos cada vez durante el primer día o dos días después de la lesión.
• Cuando su hijo se siente o recueste, eleve su pierna sobre almohadas sin doblar la rodilla.
• Dé a su hijo los medicamentos para el dolor de la manera recetada por su profesional médico.

Consulte con el profesional médico de su hijo lo siguiente:

• Cómo y cuándo le darán los resultados del análisis de su hijo
• Cuánto tardará su hijo en recuperarse
• Qué actividades debería evitar su hijo y cuándo podrá volver a realizar sus actividades normales
• Cómo cuidar a su hijo en la casa
• A qué síntomas o problemas tiene que estar alerta y qué hacer si su hijo los tiene

No se olvide de preguntar cuándo debe volver su hijo para el próximo examen de rutina.

¿Cómo puedo ayudar a prevenir una fractura de rodilla?

La mayoría de las fracturas de rodilla se produce por accidentes que no se pueden prevenir con facilidad. Sin embargo, estos son algunos consejos que pueden ayudar a prevenir una lesión:

• Use zapatos que se ajusten bien y ofrezcan un soporte adecuado.
• Haga estiramientos suaves antes y después de actividades físicas.
• Si su hijo practica un deporte que utiliza protección para la rodilla, asegúrese de que el equipo de protección se ajusta adecuadamente.
• Trabaje y diviértase de manera segura.